La carta de los Reyes Magos
No, tranquilos, todavía no ha llegado el momento de los turrones, del anuncio de la Lotería y de tomarse la pastilla de Almax antes de la cena de empresa. La carta de los Reyes Magos, además de ser uno de los manás de El Corte Inglés, es un concepto que se usa mucho en el sector IT.
No es extraño sentarte con un cliente para la toma de requisitos de un puesto informático y que nos haga un desglose de habilidades y tecnologías obligatorias que o bien no son reflejo de la realidad actual o directamente son imposibles de encontrar.
Esto da lugar a situaciones inverosímiles como por ejemplo demandar perfiles con un numero de años de experiencia en una tecnología tan actual que ni siquiera lleva en el mercado los años de experiencia que demandan para el candidato en cuestión.
Otra categoría de ofertas irreales son aquellas que yo llamo de «la navaja suiza». Es ese perfil multiusos que tiene que saber una lista interminable de tecnologías, que en algunos casos dudamos sin son realmente tecnologías o alguna especie de Pokemon.
El mirlo blanco
Un escenario que también nos solemos encontrar es el de la búsqueda del mirlo blanco, que sería ese candidato que reúne todos los aspectos técnicos y personales para hacer un encaje perfecto con la empresa y su filosofía. En resumidas cuentas, encontrar las siete bolas del dragón. Evidentemente esta circunstancia es tan remota que tiene más cabida en la escaleta de un programa de Iker Jiménez o directamente en el metaverso.
Pero no está todo perdido.
Puede ser que encontremos un aspirante con un currículo estupendo, con los años de experiencia que la empresa requiere y que además no te dice en entrevista que “su peor defecto es ser muy perfeccionista”. Existen.
¿Y qué ocurre en esos casos?
Obviamente son candidatos muy cotizados. Y lo cotizado por lo general es caro. Cuando le explicas al cliente que lo que está buscando es un 15 o un 20% más costoso de lo que tienen establecido en el tope de la franja salarial, se echan las manos a la cabeza y tiran del socorrido “me he confundido de profesión”.
Paga más o pide menos
Así que a bote pronto solo se me ocurren dos caminos para tratar de solucionar el entuerto: subir la horquilla salarial o rebajar requisitos. Con esto no quiero decir que me parezca bien la situación actual del mercado laboral en IT, que es claramente inflacionario. Los técnicos se aprovechan del momentum, como si de una ola de la playa portuguesa de Nazaré se tratase, para exigir las mejores condiciones posibles. Pero este tema lo trataremos en post venideros.
¿Qué otras vías tienen las empresas para obtener talento cuando la situación se complica?
Salario emocional
Se habla mucho en los últimos años de este concepto que serían todas las retribuciones no pecuniarias que la empresa puede ofrecer al trabajador para incentivarlo. Esto conecta directamente con unas de las conquistas cada vez más implantada en las políticas de RRHH de las empresas y no es otro que la conciliación personal y familiar. Las dos puntas de lanza que rápidamente nos vienen a la cabeza cuando hablamos de conciliación sería el teletrabajo y la posibilidad de poder disfrutar de un horario flexible. Contar con estas dos balas en la recamara puede significar en muchos casos el que la pelota se quede en un lado u otro de la red.
Tecnología puntera
Ya puedes ofrecer las mejores condiciones económicas o teletrabajo 100% del tiempo o poner una cesta con frutas 100% ecológicas en la oficina, que como el stack o servicios tecnológicos que tengas implantado no está actualizado, seguramente el candidato te mande a paseo. Y no es tema baladí y más estando en un sector como este. Tiene todo el sentido del mundo que, si apuestas por darle las mejores características a tus empleados, esto tiene que ir acorde también con la infraestructura que tienes montada.
Proyectos interesantes
No es raro encontrar respuestas del tipo “si es para el sector banca, no me interesa” o “busco un proyecto con fines sociales” o el menos usado, pero hasta hace poco totalmente mainstream “me interesa todo lo relacionado con las crypto”. Hay que tener en cuenta la naturaleza del servicio que ofrecemos, porque igual es solo para los muy cafeteros.
Cantera
Por último, si tienes paciencia y no tienes miedo a que los polluelos salgan volando del nido en el momento que empiecen a oír los cantos de sirena/bombardeo de ofertas por LinkedIn, igual tienes suerte y puedes ir dando forma al siguiente Messi de la iteración de los objetos.